Sunday, December 16, 2007

El ladrón de bicicletas

Hoy se robaron mi bicicleta justo en la entrada de mi casa. Mocharon la cadena y voila!!! WALA GUALA, adiós bici. Toda una mala combinación: un portero huevón que no quiso abrir el garage, una mamá que no llega a la casa y un alma (mi alma) confiada, caritativa y algo idiota que deja su bici fuera del edificio: "creí que estaba en Glasgow o en CU". Me cagan los rateros oportunistas de diciembre. ¡Pinches putos!

Tuesday, December 11, 2007

LA VIDA LABORAL CONTINUADA

Con fondo de Jigsaw Falling Into Place repeated

Una vez más compruebo mi teoría de no dar nada a niguna empresa.

Si tuviera un lector de karma saldría algo en mis trabajos. Siempre que quiero dar todo no son demandantes y cuando no quiero hacer nada, demandan algo más que una habilidad especial para leer la mente de alguno que otro idiota.

como cuando jalaba cables y hacía mis tareas de literatura en la universidad

o cuando jugaba 4 horas dominó en un call center.

o cuando leía Frankestein en una tienda esotérica.

o cuando trabajé de mesera en un restaurante sin comensales.

así y así y así hasta el infinito, pareciera que no sé trabajar cuando me lo propongo.

En cambio hago cosas horribles por nada de dinero, encuestas, corrección de estilo de jugadores de videojuegos, meserear (esta vez para siete familias seguidas).

Creo que el trabajo en Torre del Mal es una combinación de toda mi vida laboral. Las horas se vuelven cada vez más discrecionales, uno puede llegar muy tarde y al día siguiente llegar temprano, uno puede salir temprano o de plano omitirse el día completo. Mis funciones burocráticas se pasan entre monitorear noticias, que no salen nunca como nuestras novedades de Guadalajara, y esperar algo inexistente como nuestros libros de Julio.

Justo cuando me estaba pareciendo insoportable ir al mismo lugar y ver a las mismas personas y soportar a la misma jefa, me anuncian que me van a correr, o nos van a correr.

Paratrabajar para Naniana Togueira hay que tener un nivel de licenciatura técnica o infereior y gustar de tomar litros y litros de cocacola, ser hipócrita, vengativo e intrigoso y muy especialmente estar dispuesto a no planear las labores a desempeñar. Todo lo anterior para preferentemente regalar títulos, premios y puestos a conocidos y distinguidos miembros, doctores, secretaras, militares y muchachas con un solo ojo.

¿Habrá leido alguna vez un libro de los que Herrasti hace referencia en sus obras? Digamos algo de filosofía, tragedias clásicas o por lo menos las obras de su propio jefe.

No lo creo, ella sólo sabe hacer 100 entrevistas en menos de 5 minutos.
(Por cierto que las entrevistas son el único modo posible y contundente de promoción editorial)

Pero en lo que a mí, Karla y Gama respecta, nos espera el exilio de la Torre del Mal, o sea nos perderemos de su distinguidísima compañía en la Casa de Francia, las fiestas del Canal 22 y los días de nuestra vida.

Este trabajo fue tan delicioso como un litro de jugo de naranja y tan repugnante como el comedor de la Feria del Libro Infantil y Juvenil.

¡Que viva la anarquia laboral! Hay que inventar ventanas donde no hay puertas.

Wednesday, December 05, 2007

Flashback

en algún momento durante la mañana, seguramente en una de las cuatro o cinco veces que subí las escaleras entre el primer y el tercer piso de la Torre del Mal, tuve una placentera descarga de hormonas y me acordé de esta rola http://www.youtube.com/watch?v=GDvclp2v7oM&feature=related, ver tambíen el original http://www.youtube.com/watch?v=PYxl-4oRu1U&feature=related

Lejanos y dulces tiempos en los que no entendía ni jota de inglés pero me entretenía la música.

We love all the all of you

Se ve tan viejo, como una huella de LCD en los dientes de un hippie.

the skies are blue

when I cry for me I cry for you

Nunca en todos estos años supe el nombre del grupo, era demás una de las canciones favoritas del escritor a la media noche...
Spacehog, por si acaso lo vulevo a olvidar

Tuesday, December 04, 2007

Cocotte encuentra el placer

Como estoy harta de todos, en especial de recordar mis historias infortunadas en los meses de verano. El amor que nunca tuvo sentido. Como tengo miedo de marzo y de todos los posibles regresos de las deudas del pasado. Y mi único amante está demasiado lejos, todavía. Sólo por eso me compré A la sombra de las muchachas en flor, que anhelaba desde hacía más de un año y que sin duda me pondrá en otra etapa similar a las diversiones tan gentiles con el estudiante de música barroca y su amigo calvo a los 20. Pero eso no es todo, nada más por aumentar el hedonismo, anexé a la lista de compra Las Metamorfosis de Ovidio. Lo que más me gustó fue pagarlos así, fime acá gracias, recuerda el hambre de Europa, cusccus y verduras niña. De modo que estoy leyendo esas dos delicias mientras me tomo una caja entera de Earl Gray... sola.